martes, 19 de abril de 2011

En Girón y en Rebelde tras la victoria.


Bitácora 19 de abril, Equipo Girón Rebelde.

Este día que los cubanos reconocemos como el de nuestra victoria, constituye nuestra última constancia de esfuerzo común en el periplo de más de 15 días tras las huellas de la historia. 

Recibimos este 19 de abril con un conteo de segundos junto a los gironences y cienagueros que en las mismas arenas de la playa en la que se asestó la gran derrota al imperialismo yanqui, esperamos a que el reloj marcara justamente las 12:00 a.m.

Inspirados en el aniversario 50 de la victoria de Playa Girón un grupo de artistas de diversas generaciones cantó a la paz y a la vida. Niños, jóvenes y adultos sentados en la arena quisieron ser testigos de esta celebración de pueblo junto a 50 destacados jóvenes de la provincia que fueron los protagonistas en esta ocasión de la tradicional caminata de 62 kilómetros desde el antiguo central Australia hasta Playa Girón.

Una vez lista desde muy temprano  la explanada frente al museo que en este paraje de la geografía cienaguera  recoge la historia de aquel abril de 1961, los matanceros iniciaron el acto provincial por el aniversario 50 de la Victoria contra los mercenarios que llegaron a invadir nuestro territorio.

Combatientes, familiares de víctimas civiles de la invasión, cienagueros y matanceros en toda su dimensión celebran hoy el triunfo extraordinario de aquel día 19 que regaló muchas primaveras más a los cubanos en compañía de su Revolución.

La impronta de este pueblo ubicado al sur de matanzas seduce e inspira. Tanto así que su condición de bastión inexpugnable constituye referente por estos días para cineastas alemanes quienes se proponen reflejar en su documental la obra de los gironences. Y nos enorgullece de modo muy sano que nuestro pequeño granito de arena en esta suerte de misión periodística perdure en una parte de ese material.

Así como retornan los recuerdos y las emociones propios de una hazaña, sobrevienen ahora los momentos, tensiones, satisfacciones y lugares por los cuales el equipo ha dejado una humilde huella tras la historia.

Por nuestras frecuencias de Radio Rebelde se han escuchado esas voces anónimas que marcaron nuestro devenir histórico, autoridades políticas, gubernamentales y económicas, gente de pueblo que con palabras sinceras y sencillas  han logrado sensibilizar nuestra labor.

Han sido  días de compartir con el matancero, momentos en los que nos han permitido escuchar sus almas,  compartir anhelos y decisiones. Gracias matanceros por esta acogida, por ser buenos anfitriones, por esa osadía y valor de saber bien   mostrar el dolor de la desaparición de los seres queridos ante el llamado de la patria.

Razón le acompañaba al Comandante en jefe Fidel Castro cuando caracterizó al matancero como un habitante culto, laborioso y revolucionario.

Gracias por el ejemplo:
Equipo Girón Rebelde.

lunes, 18 de abril de 2011

Bitácora del lunes 18 de abril.


Iniciamos nuestras transmisiones con un homenaje al recientemente desaparecido coronel  Francisco Tobar Tamayo, integrante de la tercera columna del tercer frente oriental Mario Muñoz Monroy, santiaguero de nacimiento y cardenense por naturalización.
 Tobar integró la primera hornada de tanquistas, casi sin graduarse de la escuela de Managua, asistió a su nuevo bautismo de fuego en los combates de Playa Girón donde se ensayó como jefe de destacamento. Fue Playa Girón, según sus confesiones, el momento que con más fuerza y cariño  atesoró y no era para menos.
Librados los primeros combates de la incipiente escuela de tanquistas de la naciente Revolución, quiso el azar que en la tarde del 20 de abril de 1961,  sirviese de amunicionador al Comandante en Jefe en el momento del abatimiento final del buque mercenario Houston, en una suerte de cañonazo que consagrase la Victoria sobre el imperialismo norteamericano en las arenas de Playa Girón.
A Tobar le conocimos como una persona de gran modestia, dado muy poco a conversar sobre sus andadas de “guajiro bruto”, como se tituló en su primera presentación cuando le pedimos explicaciones sobre el por qué la incorporación a la lucha armada.
Luego de compartir algunos pasajes de su vida,  que con calma va mostrando poco a poco, Tobar se presenta como gran admirador de Fidel Castro, su voz sube de nivel, timbran sus cuerdas vocales con mayor registro y la emoción le embarga en gozoso viaje a esos momentos.
“Si, es cierto, viví ese momento en que Fidel decide abatir el Houston, porque desde el buque ya varado por los efectos de la aviación revolucionaria, le habían  causado la muerte a un bravo combatiente de la sierra Maestra que había conminado a los mercenarios a la rendición. Como muestra de represalia el Comandante en jefe me pide cargar la pieza del SAU 100 y le hicimos varios disparos, el primero,  en la inexperiencia nuestra, fue fallido, no así los otros que le produjeron gran satisfacción  al punto de abandonar el SAU y gritar: “yo fui quien le dio, yo fui”
“Imagínate- nos confesó en aquel momento Tobar- mis compañeros me admiran por compartir ese instante con Fidel y te digo, para mí, fue el mejor momento de mi vida”.
Casi en las postrimerías de esta epopeya periodística no abandonamos el anhelo de trasmitirles a quienes nos escuchan dentro y fuera de Cuba, la hazaña del pueblo en aquel lejano abril. Mientras apreciamos el mejoramiento de las condiciones de vida de los cienagueros nos sensibiliza entre tantas cosas el agradecimiento de esta gente humilde. Una lágrima dice más que mil palabras, así lo hemos corroborado.
Ya se alistan los detalles para la conmemoración de los matanceros por el aniversario 50 de la victoria del pueblo en las arenas de Playa Girón.
En medio de las transmisiones recibimos la visita de Igmar, un joven cineasta alemán, y su compañero camarògrafo, prendado de la vida e historia de Playa Girón, una persona previsora que con tiempo corrió todos los trámites para compartir las historias, leyendas y el diario quehacer del  gironense con motivos del aniversario 50 de la Victoria sobre el imperialismo norteamericano.
Igmar llevarà memoria sobre la vida diaria en Playa Giròn, de cómo los han acogido sus pobladores y de la forma en que han compartido sueños, leyendas, la interacciòn con la naturaleza y lo que más le ha llamado la atenciòn: la obra de la revoluciòn cubana en estos años en la ciénaga.
El equipo Girón Rebelde compartirá las impresiones de los cienagueros en esta celebración.    

domingo, 17 de abril de 2011

Y con ese hilillo de vida que le quedaba gritó: !Pero ganamos !

El doctor Julio Font Tió, Profesor Titular de la Universidad de Ciencias Medicas de Matanzas y Premio Nacional de Pedagogía 2010, rememora con particulares lujos de detalles ese lunes 17 de abril de 1961 en Playa Girón.

“Como no recordar ese día, resulta que sobre las 4 de la madrugada, mi hermano que era camarógrafo de CMQ me llama por teléfono y me dice: se tiraron. Fue suficiente ese rápido aviso para comenzar a llamar a mis compañeros y constituir un equipo de cirugía; tarea complicada por la cantidad de especialidades que se integran, pero por suerte, la disposición fue rápida y antes del mediodía llegamos al hospital de Jovellanos, en el centro de la provincia”.

Interrogado sobre las calamidades que podría haber tratado como cirujano en las primeras horas de la invasión, nos mira detenidamente y comenta: “Bastó apenas media hora de haber improvisado el quirófano, para recibir heridos. La guerra genera horribles consecuencias. Cuerpos destrozados, miembros mutilados, órganos fuera de sus cavidades, y esas quemaduras de napalm que junto a la cura, saltaban los girones de piel”.

Pero Julio nos mira fijamente y en voz que torna casi un susurro confiesa: “Mira, jamás se me olvidará la mirada de ese joven de apenas 20 años. Llegó el mismo día 19, casi en la noche, con las caras internas de los muslos destrozadas, le faltaban los genitales y tenía un horrible agujero en el periné desde el que afloraban las vísceras”.

El notable cirujano matancero guarda silencio y luego de llevar su dedo índice a la boca comenta: “Ese muchacho apenas tenía pulso, tampoco  presión y con  ese hilillo de vida que le quedaba, me miró  fijamente  y luego de una sonrisa de satisfacción, una real sonrisa que me pareció imposible en su estado, gritó con fuerzas que no alcanzo a saber de dónde -y perdone usted que no suelo usar esa palabra-, pero en honor a ese valiente, he de mencionar tal como fue: coñoooo, pero ganamos.”

“Esa frase y esa mirada de satisfacción en un momento tal crucial,  me han martillado siempre, sobre todo en los momentos difíciles. Esa mirada no era de un moribundo, de quien sabía iba a morir inexorablemente. El joven no mostraba una expresión  de espanto ni temor y muchos menos arrepentimientos. Por eso, hoy es que lo revelo, a casi medio siglo,  porque es un homenaje  al valor  que dedico a nuestra  juventud porque sé que en ella, está el futuro de nuestro socialismo.”

Bitácora 17 de abril de 2011.


Hasta el pantano se alzó contra el ultraje.

El día comienza en Playa Girón. El astro rey aún no asoma y desde nuestro nuevo local de trasmisiones muy cerca del museo que recuerda la epopeya de abril de 1961, reúno detalles en mi pensamiento de todas esas vivencias que por estos días cienagueros y combatientes comparten con el equipo Girón Rebelde.

Fresca y apacible la madrugada nos convida al repaso de pasajes indelebles de una historia que nos pertenece. Por más que intento imaginar ese cielo estrellado y este pedazo de tierra del gran humedal bajo las balas enemigas solo alcanzo a comprender la desesperación de los pobladores que 50 años atrás se vieron obligados a interrumpir el descanso nocturno para poner a salvo sus vidas.

Algunos se refugiaron en  el monte según nos cuentan: mujeres con niños, ancianos, familias enteras que despertaron bajo supuestos truenos, pero que no eran más que las muestras más certeras del comienzo de la invasión mercenaria por Bahía de Cochinos.

Desde las 2:00 a.m. había comenzado el desembarco por Playa Larga y Playa Girón con apoyo aéreo y lanzamiento de paracaidistas. Era el día y el lugar muy bien escogidos para que las tropas enemigas conformadas por 1511 hombres iniciara la presunta ocupación del territorio.

Era el primer día y duros combates sostuvieron las nuestras fuerzas con los que venían a usurpar nuestro espacio y nuestra libertad. Los mercenarios venían dispuestos a todo, incluso a quitarles las vidas a los civiles o tomarlos como rehenes si era necesario.

Ese día ganamos también una importante batalla en Pálpite, y los diversos batallones de las Milicias Nacionales Revolucionarias se desplegaban por toda la zona para impedir el avance de los invasores.

Medio siglo nos separa ahora de aquel hecho que costó la vida a 156 compañeros. 65 horas después de aquella madrugada del 17 nuestros combatientes le propinaron la primera gran derrota al imperialismo yanqui en América Latina.

En Playa Girón se respira esa historia. Testigos vivientes y pruebas de los hechos quedan como evidencia de aquella epopeya del pueblo cubano. Pero en estas costas el mar muestra hoy sus aguas tranquilas. Otro Girón convoca y espera por la reacción resuelta de los cubanos.

Llama la atención como en tan poco tiempo, con muy pocos recursos, se organizaran hospitales de campaña, cocinas para el frente, centros de información para que familiares conozcan del paradero de sus soldados, de los que permanecían vivos y de los que perdieron sus vidas en defensa del socialismo.

Es un viaje a los orígenes de estos hechos, que en la complicidad de la madrugada nos asalta y se nos revela como en montaje cinematográfico, donde planos, muy breves, de apenas dos, tres segundos, nos ponen ante escenas en los que se muestran heroísmo y dolor, muerte y alegría, esperanza y desencantos.

Comienza a aclarar y se nos devela el  cienaguero en su ajetreo diario, tranquilo, esperanzador y con esa resolución, casi  disimulada;  en un gesto de generosa humidad y orgullo  de vivir en un sitio donde la joven revolución demostró lo que era capaz de defenderse. Como dijera un cienaguero de surcos de tiempo en su cara y manos: hasta el pantano se alzó contra el ultraje.

sábado, 16 de abril de 2011

Los combatientes de la prensa desandan Girón


16 de abril Bitácora del equipo Girón Rebelde.
Llegamos al punto final de nuestro recorrido: Playa Girón. Iniciamos hoy la segunda trasmisión desde este sitio de la geografía cienaguera inmortalizado en la historia por la invasión mercenaria el 17 de abril de 1961 y donde el imperialismo yanqui sufrió su primera gran derrota.
Se hace común para este equipo de trabajo establecer diálogos con diversas generaciones aquí en Girón, y para todos resultan muy familiares las vivencias que avalan los hechos de aquellos lejanos días. Más que las fotografías, los objetos personales de los caídos y las armas que propiciaron la victoria cuentan las anécdotas de los testigos presenciales de aquellos 3 días de abril cuando la temprana revolución cubana estaba amenazada y había que defenderla.
Playa Girón muestra aún sus cicatrices pero la obra de la Revolución es perfectamente perceptible durante sus 50 años. Hasta aquí han llegado los cienagueros de parajes más intrincados en busca de mejores condiciones de vida, pero los 18 asentamientos poblacionales de la Ciénaga hoy exhiben otra realidad.
Atrás quedaron los tiempos en que solo llegaba hasta aquí un carrito de línea, las calles no estaban asfaltadas, los cienagueros no tenían escuelas y ni siquiera médicos para los enfermos. Es fácil comprobar el agradecimiento de los que aquí habitan en cualquier conversación incluso la más tenue.
Nuestro equipo recorre las calles de Girón, dialoga con su gente y se encuentra ahora en el habitual horario de trasmisión, llevándole a la audiencia las impresiones de los cienagueros sobre ese desfile popular y revista militar con el que se conmemorará hoy el aniversario 50 de la Proclamación del Carácter Socialista de la Revolución Cubana.
Seguimos desde la Ciénaga de Zapata haciendo radio.         

viernes, 15 de abril de 2011

1 105 kilómetros y ya estamos en Girón.

Por supuesto que no se trata de la distancia que medie desde algún punto de la geografía cubana hasta este paraje histórico. Sencillamente, nuestro correcto, discreto,  exacto  y muy necesario para el equipo; el chofer Eduardo Armas,  fue quien hizo el  comentario al llegar a Girón: "muchachitos, este equipo Girón Rebelde, ha recorrido desde sus inicios y hasta hoy, 1 105 kilómetros".
  Playa Girón  se descubre como sitio de personas afables, francas, abiertas.  El calor húmedo  en extremo de la región  te abraza, sofoca, te sumerge e invita a imaginar  una caminata por el monte, pantanos y canalizos  de la ciénaga. No hay tiempo, por ahora para un chapuzón en el mar, si lo hacemos, que sea justamente, el día 19.
Lejos de considerar  que casi concluye nuestra aventura, esta suerte de clase de historia  y aprendizaje fructífero con testigos que conservan, como labrada en piedra,  la memoria de los hechos, vencemos el cansancio y redoblamos los bríos para asomarnos  a una cobertura que alcance el detalle quizás poco divulgado,  la impresión desechada por colegas, o quizás, no descubierta en  estos cincuenta años de la invasión a bahía de Cochinos.

jueves, 14 de abril de 2011

¡Nada como una sonrisa de Nemesia!

Bitácora del Equipo Girón Rebelde
Jueves 14 de abril


Cuando Nemesia nos invitó a pasar a su modesta casita en Soplillar solo alcanzaba a observarla. En silencio la contemplé desde el amistoso abrazo a mi colega José Miguel Solís a quien ya ella conocía. Apenas pude hablar, solo contemplarla.

No podíamos continuar el recorrido sin visitar a la flor carbonera, a esa mujer humilde que con 13 años de edad vivió una de las terribles experiencias de la vida y quien dice que después no. Han pasado muchos años, más de los que tenía su madre cuando la ametralladora calibre 50 de los mercenarios la acribilló a balazos aquel 17 de abril de 1961.